Los evacuados, así como los viajeros, generalmente provienen de áreas afectadas por batallas, conflictos o una recesión, y tienen vulnerabilidades relacionadas con los problemas en los que han viajado, como el acceso insuficiente a alimentos y también agua, higiene y otros servicios fundamentales. Se revelan al peligro de enfermedades transmisibles, traumas inesperados, hipotermia, quemaduras, maternidades no deseadas, así como dificultades asociadas con el parto, así como diferentes enfermedades no transmisibles. Además, los refugiados y los migrantes corren el riesgo de tener resultados de bienestar psicológico inadecuados.
La salud de los evacuados y migrantes también está fuertemente vinculada a los determinantes sociales del bienestar en las áreas de acogida. Para promover la seguridad de la salud pública para ellos y también para las poblaciones de acogida, los refugiados y los migrantes deben tener un acceso equitativo a servicios de salud y bienestar de alta calidad, libres de discriminación, exclusión y estigmatización. El Programa de Bienestar y Migración de la OMS colabora con las naciones para promover el derecho a la salud y el acceso a soluciones de bienestar de calidad y también culturalmente adecuadas, con la seguridad social y financiera adecuada.
Demandas y susceptibilidades de salud comunes
Los evacuados y los viajeros son un grupo diverso y en realidad tienen necesidades de bienestar variadas, que pueden variar de las de las poblaciones anfitrionas. Realizan viajes largos y agotadores con acceso inadecuado a alimentos y agua, higiene y otras soluciones fundamentales, lo que aumenta el riesgo de enfermedades infecciosas, específicamente sarampión, y también enfermedades transmitidas por alimentos y agua. Asimismo, pueden estar expuestas a lesiones, hipotermia, quemaduras, embarazos no deseados y problemas relacionados con el parto.
Además de diversas enfermedades no transmisibles como resultado de la experiencia del movimiento, lo que limita el acceso y también las políticas de asimilación y exención. Los refugiados y también los viajeros pueden llegar a la nación anfitriona con enfermedades no transmisibles mal manejadas, porque no recibieron tratamiento durante el viaje. El tratamiento materno suele ser un punto de contacto inicial con los sistemas de salud para las mujeres refugiadas y migrantes. Los evacuados y los migrantes también pueden correr el riesgo de una salud psicológica inadecuada debido a experiencias angustiosas o exigentes.
Cómo podemos ayudar a los evacuados?
Todos podemos hacer algo, aunque sea marginal, para dar la bienvenida a los evacuados. A continuación se presentan algunas ideas: Tomar medidas. Todos los países deberían hacer todo lo posible para asegurar a los evacuados, sin embargo, en la práctica, muchos países, especialmente los más ricos, hacen muy poco. Haz donaciones de calidad.
Numerosas organizaciones que trabajan con los evacuados dependen de las contribuciones, que consisten en ropa de segunda mano, juguetes y muebles. Busque en línea proyectos regionales que requieran donaciones. También puede motivar a sus amigos, familiares o vecinos de al lado para que contribuyan, especialmente antes y después de las celebraciones de cumpleaños o vacaciones, o cuando las personas se mudan y desean deshacerse de artículos o regalos específicos. Si tiene un área libre o si tiene un lugar para alquilar, consulte en línea a las compañías que ayudan a los evacuados y también a los cazadores de asilo a localizar bienes raíces de emergencia, de corta duración o irreversibles. Sea voluntario. Las organizaciones que se ocupan de los evacuados a menudo necesitan voluntarios para establecer asociaciones con los evacuados, proporcionarles programas de idiomas o brindarles orientación legal o profesional, por nombrar algunas cosas.